Los pensamientos intrusivos son pensamientos perturbadores y negativos que vienen a la mente de una persona de repente. Aunque en su mayoría son inofensivos, pueden crear una experiencia negativa. Pueden afectar el comportamiento social de uno y causar pensamientos inapropiados y altos niveles de angustia.
¿Qué son los pensamientos intrusivos?
La mente es la parte del cuerpo que posee habilidades de pensamiento y tiene todos los principales poderes de control. Los pensamientos son un proceso cognitivo consciente que ocurre independientemente de la estimulación sensorial. Por lo tanto, el pensamiento puede surgir de la nada. Los pensamientos intrusivos son pensamientos no deseados e involuntarios que surgen de la nada y causan una angustia significativa. Los pensamientos intrusivos capturan la mente y persisten. Pueden ser angustiosos y, para algunos, violentos y perturbadores. Es común entre las personas que muestran síntomas/signos de depresión y ansiedad. Además, el estilo de vida altamente estresante de hoy en día puede ser un desencadenante externo. Los pensamientos pueden volverse aterradores y pueden conducir a la agresión y la violencia, frecuentes en personas con trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) y depresión.
¿Cuál es la ciencia detrás de los pensamientos intrusivos?
Los pensamientos intrusivos rebeldes pueden entrometerse en varios patrones, por ejemplo, imágenes, impulsos fuertes, ideas y opiniones.
- La disminución del flujo de neurotransmisores puede ser una de las razones de los pensamientos intrusivos. La serotonina es un neurotransmisor responsable de los cambios de humor, la ansiedad y la depresión. Cuando los sitios disruptivos en el cerebro no reciben suficiente serotonina, a menudo puede convertirse en una causa de pensamientos intrusivos, lo que se nota en los casos de TOC y TEPT, donde hay insuficiencia de serotonina.
- El estrés y la ansiedad pueden desencadenar pensamientos intrusivos.
- Los desequilibrios hormonales también pueden causarlos durante los períodos de aislamiento. Cualquiera puede tener un pensamiento intrusivo en un momento específico.
- Los problemas subyacentes de salud mental o el trauma son otra razón para los pensamientos intrusivos.
- Las lesiones cerebrales traumáticas o la enfermedad de Parkinson también pueden provocar tales pensamientos.
- El deterioro de la salud mental, el pensamiento excesivo y las situaciones estresantes también pueden causar pensamientos intrusivos.
Si bien existen pocas razones establecidas para la causalidad de los pensamientos intrusivos, se necesita más investigación para las personas que los experimentan sin ninguna causa subyacente. Por lo tanto, es esencial comprender los determinantes de su causalidad.
Pensamientos intrusivos y trastorno de ansiedad
Los pensamientos intrusivos se encuentran entre los síntomas significativos de los trastornos de ansiedad. Las personas experimentan rondas repetitivas de ansiedad intensificada. Cada idea que comparten parece precisa, lo que afecta gravemente su calidad de vida, ya que no pueden concentrarse en nada excepto en sus pensamientos intrusivos. Los pensamientos intrusivos están principalmente relacionados con el trastorno de ansiedad, independientemente de cuán irrelevantes sean las ideas. Algunos también están relacionados con los trastornos de pánico. En este caso, las personas temen sufrir un ataque de pánico grave. También experimentarán rondas de dificultad para respirar y mareos. Uno de los principales temores entre las personas que lidian con un trastorno de ansiedad generalizada (TAG) es su falta de confianza para deshacerse de los pensamientos intrusivos.
Cómo abordar la causa raíz de tus pensamientos intrusivos
Los pensamientos intrusivos se pueden abordar y manejar si se comprende la causa raíz. Uno debe reducir la sensibilidad de estos pensamientos para hacer esto. Hay varias formas de abordar estos pensamientos intrusivos. Éstos incluyen:
1. Terapia conductual cognitiva (TCC)
La terapia es una excelente manera de abordar los pensamientos intrusivos. Una persona entenderá por qué siente que lo que siente es correcto. Comprenderán objetivamente la situación y trabajarán sobre el tema con un terapeuta. La Terapia Cognitiva Conductual es muy eficaz en el modelado de la conducta. Uno aprende a manejar mejor los pensamientos y ser espectador cuando llegan las ideas. Uno también aprenderá estrategias de afrontamiento saludables que los ayudarán a sentirse mejor.
1. Meditación
La meditación es otra forma efectiva de lidiar con los pensamientos intrusivos. Lo calma, lo centra y le permite dejar ir los pensamientos. También aumenta la concentración y les ayuda a manejar mejor sus estados de ánimo.
Cómo detener los pensamientos intrusivos
Los pensamientos intrusivos no son deseados y las personas que los experimentan generalmente están preocupadas. Así que siguen buscando formas de detenerlos. Debido a las imágenes angustiosas, la visión y la actitud hacia esos pensamientos pesados e intrusivos son esenciales. Los pensamientos intrusivos pueden incluir relaciones, preocupaciones, muertes, seguridad o capacidad para tomar decisiones. Cualquiera que sea la forma, es necesario cuidarlos, reconocerlos y manejarlos. Cinco formas de detener los pensamientos intrusivos:
- Nunca se comprometa con las ideas en serio.
- Empiece a etiquetarlos como «»intrusivos»» y acéptelos. Que vengan, obsérvenlos y que se vayan.
- Trate de observar los pensamientos y comprenderlos en lugar de alejarlos. Por favor, no huyas de ellos, sino enfréntalos. Evitarlos causará dificultades más adelante.
- Recuerda que nada depende de ti y que todo sucede naturalmente. No se culpe en ninguna situación por lo que está sucediendo. Deja que suceda, y déjalo ir. Sea un espectador.
- Permítete aceptar el hecho de que los episodios volverán. Pero enfrentarlos con fuerza y coraje es una forma de combatirlos. Busque la ayuda de un profesional y facilite su camino en todo el proceso. La terapia cognitivo-conductual (TCC) es una de esas terapias que ha demostrado ser beneficiosa en el caso de pensamientos intrusivos.
Conclusión
Los pensamientos intrusivos persistentes son desencadenantes, oscurecen la claridad y aumentan los niveles de ansiedad. También pueden ser debilitantes, hasta el punto de que algunos casos/instancias necesitan atención y manejo médico. Pueden ser en forma de ilusiones, sonidos e imágenes. A menudo, se vuelve difícil manejarlos y vivir constantemente con ellos. Para reconocer los pensamientos intrusivos, uno debe reconocerlos y lidiar conscientemente con ellos mientras está atento y consciente de sí mismo. Para obtener ayuda y más claridad con respecto a los pensamientos intrusivos, comuníquese con UnitedWeCare hoy.